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Acabas de encontrar la llave de la caja de Pandora. Estás a un paso de conocer más sobre mi y posiblemente también, más sobre ti.

Soy Mistress Isis, Dominatrix Exclusiva Profesional con sede en Sevilla (España). Eso es lo primero que debes tener claro, me dedico a la Dominación Femenina desde que descubrí mi pasión y mis habilidades.

Además de eso, creo contenido Femdom y Fetichista que distribuyo en diferentes plataformas.

Exigente, discreta, elegante, meticulosa, inteligente y ambiciosa.

Tengo todo lo que quiero, disfruto de todo ello y de mi forma de vida y no me conformo con menos. Ahora, es momento que descubras que es lo que quieres tú aquí.

En esta web podrás encontrar muchísima información sobre mí y todo lo que realizo, desde sesiones presenciales y las prácticas que hago hasta los viajes que tengo previstos.

Con independencia del motivo que te lleve a contactarme, no somos amigos, no me trates como tal. La educación y la claridad son pilares básicos e imprescindibles. Detesto la gente que toma confianzas que no se le han dado, la informalidad o las explicaciones vacías.

Si has de comunicarte conmigo, tu mensaje deberá ser educado, claro y todo lo conciso que puedas ser. Si no obtienes respuesta tras unos días, es que no estoy interesada; evita repetir del mismo modo, porque seguirás obteniendo nula respuesta.

Soy muy recelosa de mi tiempo y detesto perderlo, por lo que tengo en alta consideración quien también lo entiende de este modo, y se esfuerza en que me apetezca responderle. 

No soy una máquina expendedora de fantasías. La Femdom es mi forma de vida, y aunque siempre es mi deseo que todas las partes disfruten y se sientan plenas, y me gano la vida con ello, no estoy en venta.

Mis principios están por encima de todo y entre ellos: yo no estoy para complacerte, ni tampoco soy un supermercado.

Yo ya vivo como quiero y no preciso de tus ofrecimientos para conseguir lo que deseo o sentirme realizada, ahora mismo el feeling para mi es lo más importante y selecciono de entre los interesados en conocerme o reunirse conmigo quienes de verdad me apetecen.

Una vez estés preparado, atrévete a complacerme.